Si vienes a sentirte incómodo: bienvenido. En esta ocasión, la directora estadounidense Emerald Fennell y una de las productoras, Margot Robbie, buscan ese propósito, pues, con todas las promesas del mundo del cine, nos muestran el reciente film feminista, pero no nuevo en el tema, Promising Young Woman. Este es un cine que se volvió necesario, ya que sólo hablarlo y exponerlo social/políticamente no ha sido suficiente y hoy día es una primicia ética. Además, aunque parezca extraño, es un thriller de principios del 2017, cuando la también guionista, Fennell, comenzaba a hervir en su vientre el plan de realizar dicha cinta, se pensó como una comedia negra.
Este drama del tipo indie fue pensado, desde el inicio, como algo serio y dudoso, el primero por parte de la directora y lo segundo porque los productores temían por la audiencia. Por el final, no por la película en sí, angustiaba cuál sería nuestra reacción; sin embargo, el trabajo comenzado en 2019, como lo dice el nombre, ya era una promesa. Después de ser culminada se estrenó en el Festival de Cine de Sundance en enero de 2020, programada para abril del mismo año; en cambio, una pandemia, que de sobra sabemos cuáles fueron sus consecuencias, retrasó el proyecto. Pero, si el embarazo de siete meses de la directora no lo complicó, ¿por qué sí un virus mortal? Es por ello que para diciembre del año pasado (2020), Focus Features, uno de los impulsores del trabajo, por vía on demand lo estrenó de manera limitada; asimismo ya había plan B para relanzar la película en enero de 2021, el cual generó bastante impacto y aceptación del público.
Ahora hablemos de la historia, pero sólo un poco, pues aunque muchas de las opiniones que se leyeron y escucharon antes de hacer esta pequeña reseña, indican que el final no es digno de serlo, el epílogo está calificado de poco vengativo. Aquí opinamos lo contrario, no obstante, no nos adelantemos. El papel protagonista fue pensado, desde el principio, para la treintañera Carey Mulligan, quien da vida a nuestra vengadora Cassandra Thomas "Cassie", esta mujer con tintes de una anti-heroína de cómic, pero a la vez una Uma Thurman (Kill Bill, 2004) que le gusta llevar el control de sus víctimas en un pequeño diario: es épica. Conforme se va describiendo el personaje en pantalla, realmente nos causa gracia que a sus recién cumplidos treinta aún viva con sus padres, olvide su fecha de cumpleaños y viva tan lineal y decadente atendiendo una cafetería local; entonces no es tan quisquilloso el asunto, pues esto son sólo los estragos de un feminicidio impune sororo de su antigua amiga de universidad, Nina.
El no creer en la justicia, en la idea de falsas esperanzas para continuar con su vida profesional, la mirada en este punto, refleja una profunda tristeza y a la vez cinismo (cuando lo necesita). Ni siquiera hay esperanza en el amor. Aún así ella rompe con el caparazón que sus padres le ofrecen todos los fines de semana, si no es que cada noche. Demuestra una fuerza impecable, delicada y fría, de acero con algo sencillo como regresar a casa descalza comiendo un "jocho" en señal de triunfo, omitiendo cualquier acoso callejero, lo pulveriza desde su pose de guerrera amazónica, pero, para decepción de muchos, en Hispanoamérica se tradujo como "Hermosa Venganza", de alguna forma demerita el mensaje principal y la triste realidad alcanza hasta al título de este largometraje.
Conformada por cinco actos y plagada de forma armónica con tintes pastel y rosa neón, de a ratos amarillentos y otros más azul neón de fondo junto con una canción de Paris Hilton: Stars Are Blind, la cual refleja una cultura pop millenial, porque en este momento los viejos son más viejos y Cassie sigue estancada en aquella carrera en medicina soñada, para su buena y mala suerte, esta luz es llamada Ryan Cooper (Bo Burnham), quien parece ser que también está manchado de machismo al mismo tiempo que las mujeres de aquella generación tan nefasta.
Es una película revolucionaria en la forma en que expone brutalmente todos los casos de violencia de género que existen, desde la formación del noviazgo normal que pasa sus mejores momentos hasta cuando éste se rompe y explota con oscuros instintos machistas que siempre han estado ahí y que sólo hizo falta apretar un poco la hebilla para soltar el primer golpe. En los diálogos está la mayor parte clave, obligan al macho a transpirar frío de forma que no dejan que ninguno escape. Es una montaña rusa de emociones y al estilo vengativo de V for Vendetta (2005) o de Hard Candy (2005).
Por último, mencionaremos que fue galardonada con un Oscar por mejor guion original, así como en los Independent Spirit Awards, tanto a Carey Mulligan como a Emerald Fennell. Detrás de este trabajo hay un visible reflejo de la realidad para las mujeres y como ya habíamos mencionado, para algunos no hay final explosivo y lleno de gore como lo puede exigir un thriller, más bien, es un final que termina cobrando todo lo adeudado a fin de cumplir con una venganza de años y de terminar con un duelo que se había vuelto infinito causando estragos más fuertes a nivel psicológico. Por ello el término de esta obra reitera el feminicidio de todas aquellas que aparentaban o solían tener una vida envuelta en rosa pastel.
Puedes ver la película entando al siguiente enlace:
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